viernes, 19 de abril de 2013

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Ya van dando las 3:26 y la vida en la escuela durante un viernes es la misma de siempre, rincones de enamorados, bancas con gente descansando y uno que otro desesperado. Nada en especial llama mi atención, una mano gentil me llama, su dueña preguntando si he prescenciado al hombre que abre manzanas con la cabeza, mi respuesta es un no con la cabeza, ella se atreve a tocarme, para ella no soy repulsivo, ella debe ser muy bondadosa o muy ingenua. Hablando de tacto, vi a la Luna el otro día, pasamos como 2 perfectos desconocidos al cruzar sus caminos, las únicas diferencias, su desprecio y mi arrepentimiento.

Ya no encuentro punto a todo esto, cada vez se me dificultan las cosas, mi escuela, mis amigos, mi familia, escribir... es decir, simplemente me remito a darles una ligera crónica de lo último que puedo recordar y noto que me aburro al sólo hacerlo ¿Cómo no esperar que tú lo hagas lector? Quizá estoy muriendo poco a poco, quizá el yo que escribía y que aunque se quejaba creía que las cosas cambiarían para bien, aquel que escribía, aquel que amaba, ya está muerto, sólo queda este aburrido cadaver, uno de muchos, otro más, nada especial... nada en absoluto.

(Insúltame si gustas, si me dirijó a ti, cada que me siento derrotado apareces y esgrimes palabras que me rompen aún más, sólo permitime el hacerte saber que ya gasté tú tiempo, asi que, la broma va para ti)

Quizá cierre esto, simplemente sería otra de las múltiples cosas que alguna vez ame y que eran buenas en mi vida y simplemente dejan de ser por mi manera de ser...

Ya no sé, extraño la guía y el consejo de todos... en serio los necesito.